Por Sante Pagano
¿Cuál es la misión que tenemos que cumplir en un arca? ¿Qué significa seguir la Obra de Giorgio Bongiovanni? ¿Qué significa seguir a Cristo? Creo que la respuesta se encuentra en las palabras que Giorgio nos regaló durante la jornada de Domingo transcurrida junto a los integrantes de las Arcas de Milán, Turín y Varese. Giorgio había venido a Milán para reunirnos y hablarnos, luego coincidió que ese mismo día también sangró para nosotros. El Cristo a través de su cuerpo nos dio un mensaje: “Que la paz esté con vosotros”. Esas fueron las palabras que Cristo repitió varias veces dirigiéndose a nosotros mientras Giorgio sangraba esa sangre santa, purificadora... mientras que Sonia Alea se aferraba a ese cuerpo cansado y destruido por el peso de la Cruz, ese cuerpo que se dejaba crucificar por nosotros... Sonia derramaba lágrimas desgarradoras llenas de dolor y de Amor, llenas de Gracia... lloraba copiosamente como si fuera ella la que estaba sangrando, como si fuera una única cosa con esa Pasión Crística que se manifestaba ante nuestros ojos. Giorgio y el Cristo, unidos juntos en un solo cuerpo, sangraban en la habitación de un Hotel solo para nosotros... solo para nosotros... Nosotros, humildes y pequeños servidores... qué honor... qué gracia... “QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS”... estas fueron las palabras que retumbaron en esa habitación durante más de veinte minutos... “QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS AMIGOS MÍOS, SI, AMIGOS MÍOS... HE REGRESADO POR VOSOTROS... SOLO POR VOSOTROS... VOSOTROS SOIS MIS AMIGOS, MIS HERMANOS.... ESTOY AQUÍ POR VOSOTROS... HE VENIDO A SERVIROS... QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS... QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS… QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS…”.
Él sangraba con nosotros, nosotros sangrábamos con Él... Cristo nos entregaba Su Sangre... con Su Sangre Cristo nos visitaba... y el VERBO SE PERSONIFICABA EN GIORGIO...
Giorgio había sangrado esa tarde para que Cristo cincelara en nuestros corazones esas palabras, hijas de una enseñanza enorme, de una enseñanza que no era solo para nosotros, para los hermanos presentes, sino para las arcas de todo el Planeta Tierra...
¡PORQUE ESAS PALABRAS HABÍAN SANGRADO Y UNA LLAGA JAMÁS SANGRA SIN MOTIVO!
Claro que hay que hacer la Obra, que hay que seguir las enseñanzas de Cristo , pero “QUE LA PAZ ESTÁ CON VOSOTROS”... durante la sangración Jesús nos había hablado. Esa sangre nos decía que en esa habitación éramos una única Arca... esa tarde esa sangre nos decía que las Arcas de la Tierra representaban a una única Arca unida en el AMOR DE CRISTO.
Nada ocurre por casualidad y las señales hablan, hablan siempre, porque Cristo está siempre con nosotros y jamás nos abandona, Y UNA LLAGA JAMÁS SANGRA SIN MOTIVO.
Tenéis que ser amigos de Cristo y por lo tanto amigos entre vosotros. Así nos habló Giorgio más tarde durante la reunión. El mismo Cristo al elegir a sus discípulos elegía a los amigos que lo podrían seguir. Hay una regla importante, muy importante, sin la cual no podremos hacer nada. Y es Jesús el que nos la impone, porque Él era el primero que se las imponía a Sus discípulos... CONFIANZA. Una confianza que puede resquebrajarse, tambalearse, pero solo por algunos segundos... porque inmediatamente tenemos que vencer la tentación y regresar a la Luz. LA CONFIANZA es INDISPENSABLE. La extrema confianza que tengo en vosotros, en todos vosotros, en cualquiera que pertenezca a un Arca... TODOS. Él, el mal quiere dividirnos, quiere que dejemos de hacer obras, pero tenéis que creer en la Obra, tenéis que dar la cara, tenemos que cumplir nuestra tarea. Os pido que tengáis confianza en mi, que confiéis en mi. Creo que ninguno de vosotros tiene mala fe. Puede llegar a ocurrir que algunas veces no nos entendamos, pero la confianza tiene que ser la base de nuestros diálogos. Nosotros no somos los protagonistas, ni de los éxitos alcanzados, ni de las derrotas... cuando obtenemos grandes resultados es gracias a los Hermanos Superiores y a Cristo, que nos han usado como instrumentos. Y cuando nos peleamos, cuando lloramos y nos desesperamos es a causa de los demonios que nos personifican por nuestra voluntad... pero prestad atención... no somos robots... nuestro merito es la disponibilidad, la disponibilidad que demostramos al servir al cielo, o al servir a los demonios. Y si seguimos al cielo evolucionaremos, si servimos al mal retrocederemos en la evolución.
En las discusiones pueden haber razones y equivocaciones, pero al cielo esto no le importa. ¿Cuando Jesús fue crucificado estaba equivocado? ¿Si Cristo era inocente por qué no se defendió? Si se hubiera defendido diciendo sus razones habría dividido a Su Arca, se habrían dispersado todos... es por ello que aceptó su cruz en silencio. Es como si Jesús hubiera dicho: “Yo tengo razón, mi crucifixión es injusta pero me dejo matar, elijo el sacrificio injusto por amor a mis hermanos”... No se defendió de las acusaciones que le hicieron. Por lo tanto lo que os quiero decir es que en una discusión las razones y los equívocos no tienen por qué existir cuando se pone en riesgo a la Obra, que es más grande que nosotros, nosotros no somos nada con respecto a la Obra. Entonces es la paz la que tiene que prevalecer, es la unión la que tiene que prevalecer, la Obra tiene que vencer siempre.
Jesús sabía que era inocente, la Suya fue una decisión de un amor infinito. Nosotros no somos Cristo pero ¿por más mínimo que sea nuestro sacrificio podemos hacerlo en pos de que reine el amor entre nosotros? La Obra tiene que estar por encima de nuestras razones... a menos que no se hable de una persona deshonesta... pero tienen que existir las pruebas que lo demuestren... al juez hay que presentarle las pruebas, pero NO TIENE QUE HABER desconfianza. El dinero jamás tiene que estar presente en nuestras discusiones porque es el príncipe de las discusiones... él está vivo, nos habla. En la Obra el dinero tiene que ser burlado, nos tenemos que reír de él porque el dinero SIEMPRE ESTÁ EQUIVOCADO... claramente para la Obra es indispensable pero jamás tiene que estar por encima del amor por el hermano y de la Obra que tenemos que llevar a cabo. Si hay deudas entre los hermanos tenemos que hablar en forma armónica, nos tenemos que poner de acuerdo entre hermanos... TENEMOS QUE HACER LA OBRA. El dinero es necesario pero JAMÁS TIENE QUE CONDICIONARNOS.
Todo esto es lo que nos quería decir Cristo a través de Giorgio esa tarde. Nosotros, discípulos de Cristo, tenemos que ser ante todo Amigos y luego Hermanos porque los amigos se encuentran unidos por una elección y los hermanos por la sangre. Por lo tanto tenemos que elegir amarnos y luego recordar que estamos unidos por la misma sangre, por la sangre de Cristo, esa sangre derramada desde hace dos mil años, esa sangre que esa tarde gritó: QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS... QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS... QUE LA PAZ ESTÉ CON VOSOTROS.
Nosotros, que estamos en la Obra, tenemos que ser un ejemplo, tenemos que ser perfectos siguiendo a Cristo, claro está que tropezaremos pero luego tenemos que volver a tomar la cruz sobre nuestros hombros, levantarnos y continuar hacia el Gólgota. Una cruz a la que no la puede llevar una persona sola, una cruz que tiene que tener muchos hombros en los cuales apoyarse pero con un único corazón. Por lo tanto se trata de tomar una decisión al hacer la Obra y al seguir al Águila de Juan, tenemos que decidir si seguimos al Amor sacrificando nuestra vida, o decidir si seguimos al mal, a la tentación, AL DINERO, PRÍNCIPE DE ESTE MUNDO... MALDITO DINERO. Giorgio fue claro y duro, los tiempos se acortan, nos espera un año especial... EL 2017 ESTÁ A LAS PUERTAS... el centenario de la Aparición de Fátima...
Si hay algo que he comprendido siguiendo a Giorgio a lo largo de estos años es que jamás dice algo por casualidad, al hablarnos siempre nos anticipa algo, nos revela cosas... y también nos habla entre líneas... y por lo tanto nos está diciendo que tenemos que prepararnos, tenemos que estar alertas... porque las tentaciones y las pruebas serán fuertes... pero si nos mantenemos unidos venceremos... Y LA PAZ ESTARÁ CON NOSOTROS... Giorgio fue claro y duro, pero sobre todo su discurso estaba lleno de Amor y Misericordia ya que nos advertía sobre un peligro y al mismo tiempo nos daba la solución que nos llevaría a la Salvación... LUCHAR Y TRABAJAR SIEMPRE EN LA VIÑA DEL SEÑOR, UNO AL LADO DE OTRO PARA VENCER AL MAL, PARA QUE TRIUNFE EL AMOR, ESPERANDO LA LLEGADA DE CRISTO Y DEL NUEVO REINO.
QUE LA PAZ ESTÉ CON NOSOTROS
UNA ÚNICA ARCA