DEL CIELO A LA TIERRA
EXPRESIONES SOLARES DEL CRISTICO AMOR!
SI PUDIERAIS COMPRENDER EL AMOR INFINITO QUE LA MADRE SANTISIMA SIENTE HACIA TODOS VOSOTROS HABITANTES DE LA TIERRA, ¡VUESTRO ARREPENTIMIENTO SERIA INSTANTANEO Y VUESTRA SALVACION ESPIRITUAL SEGURA!
SONIA ALEA HA ESCRITO. EL QUE TENGA OIDOS PARA OIR QUE OIGA.
LEED, MEDITAD Y DEDUCID!
DEL CIELO A LA TIERRA
Sant’Elpidio A Mare (Italia
9 de diciembre 2011. 15:09 horas
Giorgio Bongiovanni
Estigmatizado
EN EL DÍA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN
Inmersa en la más profunda sensación de soledad, de repente escucho una voz que me habla...
Una voz cálida y suave susurra a mi espíritu: “¡Mira...!”
La silueta etérea de velos blancos mueve delicadamente su mano estilizada...
Frente a mi dos ojos oscuros y profundos me miran intensamente... Son los ojos de un niño que me da su pequeña mano... le ofrezco dulcemente mi mano y él la aprieta tiernamente llevándome hasta un lugar que desea mostrarme: el infierno. El infierno de millones de niños presos de los espasmos más atroces a causa de las enfermedades causadas por el hambre, la sed y los venenos mortales con los cuales han estado en contacto, siento su llanto desesperado y veo sus manitas agitarse para librarse de ese hombre-bestia que está violándolos, veo asesinos criminales matarlos para sacar grandes ganancias de sus órganos vendidos al mejor postor, los veo vagar por las calles de nuestras ciudades ofuscados por el hambre y el frío, aturdidos por las drogas que consiguen, los veo someterse a los orgasmos depravados de monstruos vestidos de hombres y los veo vendidos como esclavos para enriquecer a sus propios dueños con su trabajo forzoso... Incapaz de asistir a tanto horror caigo de rodillas frente al niño que todavía me mira con sus ojos profundos, es como que mi estómago quiere salírseme por la boca, como en un remolino todo gira a mi alrededor hasta perder los sentidos. La manita del niño roza delicadamente mi frente volviéndome a la vida. La Señora de velos blancos todavía está allí, lágrimas de sangre surcan Su rostro de Madre... Dolorosa me susurra tiernamente: “Que el lamento esté siempre alejado de vuestra boca. Debéis ser su voz, debéis ser su fuerza, no tenéis que ser su esperanza sino su certeza, certeza de su futuro. En espera de que el Salvador, Mi Hijo, regrese para hacer nuevas todas las cosas”. “Ave María” susurran mis labios, mientras desde la profundidad de mi ser el llanto desesperado grita su plegaria al Cielo: ¿Padre del Cielo y de la Tierra cuándo se desencadenará Tu ira en esta humanidad manchada por la alta traición? ¿Cuándo permitirás a Tu Hijo, nuestro Rey y Señor, el Cristo Jesús, que ponga punto final a la masacre de Tus inocentes en este perdido rincón del Universo? ¿Cuándo será curada Tu Inmaculada Concepción de Sus mortales heridas? ¿Cuándo tu mensajero errante, Cáliz Viviente tendrá donde apoyar su cabeza porque su hambre de amor y su sed de justicia han sido saciados finalmente? ¿Cuánto tenemos que esperar Padre el soplo de Tu Solar Fuego divino que sacude todo y purifica todo? ¿Cuánto Padre?
Tus hijos al pie de la cruz, en espera de esos días en los cuales la noche será día y el día esplendor.
Con profunda devoción
Sonia Alea
8 de Diciembre de 2011