Cuando el alma llora, cuando pensamos que el Sol se apaga para nosotros, cuando el miedo acecha, cuando la soledad atenaza, cuando la existencia humana entabla ese viejo conflicto existencial de la lucha entre quienes somos y porque somos quienes somos, Ellos, Los Seres Divinos y Solares, toman forma de caricia y el Cielo extiende su dulce mano para sostener nuestro tembloroso caminar.
Si las esperanzas fijadas en una única salida fracasan, ahí están para susurrar a nuestro corazón:” Nada es absoluto en este mundo de ilusiones y de materia, Salvo los rayos del Sol, El Amor del Padre y la presencia Divina en sus eternas manifestaciones”.
Si las lágrimas llenan tus pupilas y es en la noche oscura donde tus batallas más difíciles parecen perdidas, los primeros colores del alba se abrazan para mecerte tiernamente en Su regazo.
Cuando el Amor que vives es más fuerte que la fuerza misma, cuando lo dejas que explote en tu pecho y llene el universo de multicolores mariposas, cuando el amor que sientes puede más que cualquier pensamiento y deja que tu mirada vaya más allá del horizonte, es posible hacer descender del Cielo Sus caricias.
Amor, amor que todo lo puede, que todo lo logra, que contra todo lucha, amor que vibra en los ojos de alguien, amor que empuja el viento, que calma tempestades, que abre consciencias y logra hacer ver a los ciegos. Amor que crea, amor que impulsa, amor que ama, amor eterno. Amor que da color a los colores, sonido a las notas musicales, aire al viento, sabor a los sabores, amor que construye al amor mismo. Amor que suena, que sabe a miel, amor que abraza, que se ausenta pero nunca se va, amor que es Amor. Amor que invade cada célula de tu ser y no sabes donde eres vos y donde es El. Amor que inspira, amor que sonríe y que llora a la vez, tu amor, mi amor, nuestro amor.
Amor de los eternos amantes, de los soldados en la batalla, de un niño al besar, amor de La Madre.
Cuando recibí el mensaje de José de inmediato me puse a disposición para ayudarlo con aquello que me dijo que estaba sucediendo en su casa, no tenía idea de que podría ser así que dejé todo lo que estaba haciendo y me concentré en él. Cuando vi la primer imágen sentí un vuelco en mi corazón. De inmediato José activa la video llamada y fuí transportada a otra dimensión. Mi mente escéptica de inmediato empezó a vomitar preguntas, de que estaba hecha la Virgen y que temperatura había en el lugar, el Sur es frío aún en esta época del año, pero mi alma y mi espíritu ya conocían las respuestas. Y hasta intuían porque se me permitía ser inmerecido testigo de un acontecimiento de esta naturaleza. Solo el Padre sabe de mis pensamientos, de mis sentimientos, de mis luchas, mis anhelos, mis temores, conoce mis preguntas y realiza sus respuestas.
De inmediato le dije a José que tocara el líquido que bajaba de los ojos de la hermosa Virgen con el niño en brazos y el me responde que era aceite...
Los instrumentos:una niña llamada Jazz, y una estatua de yeso y a través de ellos, la Magnificencia del Amor que se hace carne y oleo.
Amor que transforma, amor que alquimiza, amor que solo ama, amor que purifica, amor que renace al alma, amor que mata al tiempo y cura las heridas. Amor, simplemente amor y absolutamente Amor.
Amor que mueve los mundos e ilumina las estrellas, amor que te abraza y te lleva lejos solo un instante porque tu misión es en la Tierra. Amor que abre tus ojos cada mañana y los cierra al caer el Sol. Amor de dulce melodía y del trinar de los pájaros. Amor de un niño que sufre, de un abuelo que llora el asesinato de un hijo, amor de un terremoto y de la Justicia del Padre. Amor manifestado, amor etéreo, amor purificado.
Amor oscuro, amor límpido, amor real, el Amor de los Amores.
Lo tenemos a El y tenemos todo, podemos librar la más tenebrosa de las batallas y padecer la peor de las heridas. Podemos enfrentar al mundo, podemos viajar más allá del universo o ser el universo y transformar a las galaxias. Con tan solo dejar que nos toque podemos derrocar a los tiranos y liberar a los pueblos, podemos alcanzar la cima de la montaña o podemos incluso acercar a la montaña hacia nosotros. Podemos germinar un grano de mostaza en el desierto. Podemos adquirir conocimiento o ser la gnosis misma. Podemos beber el agua o ser el río. Podemos comer el pan de la vida o ser el propio pan. Podemos Ser Libres, pero Libres de Verdad si tan solo somos Amor. Amor único, basto, lleno y vacío a la vez, el Amor que lo es todo desde antes de ser Amor.
El Amor que bajo del Cielo y que camina entre nosotros.
Amor para siempre manifestado en Nuestra Obra.
Erika Pais.
30 de Noviembre 2016
Cuando en el reloj marcaban las 10:45 y mientras yo estaba cocinando Jazz me llama y me dice: ¿Papa, que le pasa a la Virgen?
Cuando me acerco para ver me encuentro con que la Virgen, la que es de yeso y que trajimos hace un tiempo de Santa Rosa la Pampa en un viaje que hicimos para ayudar a nuestros hermanos a realizar una charla y que se encuentra en el arca tiene alguna especie de líquido.
Me agacho y logro percibir un aroma particular que al sentirlo bien me recuerda al olor a rosas; el líquido salía aparentemente de uno de sus ojos y se escurría hasta la base pasando por su mano y recorriendo su manto, la sensación era muy bella y poco a poco el aroma a rosas se sentía más intenso con una sensación muy bella extremadamente bella que no puedo describir con palabras y que aun al escribir estas palabras la sigo sintiendo, así como el aroma a rosas que sigue estando presente en el ambiente habiendo pasado ya casi tres horas desde que sucedió este descubrimiento por parte de Jazz. Saque fotos y la llame a Erika Pais para indicarle que había pasado algo y que quería saber qué opinaba, siendo que yo jamás había experimentado algo así. Le envié fotos y usando las video llamadas le hice participe de lo que estaba ocurriendo en ese momento.
Ella percibió al contemplar la Virgen, una sensación; que tal vez era la misma que sentía yo.
En ese instante en hermandad con Erika, Bruno y Jazz compartimos algo maravilloso indescriptible para mí, con palabras pero colmado de amor.
Jose O. Guzman
Arca Santa Cruz
30 de Noviembre 2016