De Alice BeiEl sábado 4 de octubre, la Librería Libera de Lugano fue sede de un encuentro muy esperado con Marco Marsili y la asociación “Dal Cielo Alla Terra”.
Cinco años después de nuestro último viaje a Suiza, este encuentro no fue casual: cada evento parece seguir un programa más grande y preciso, que guía los pasos de quien está en camino hacia la verdad.
Todo lo que cada uno de nosotros hace, nace de experiencias personales y, con el tiempo, madura y se transforma. Así, este evento también representó una nueva etapa en un camino de crecimiento compartido.
El comienzo de un contacto extraordinario
Marco ha contado con su habitual pasión su primer contacto con la realidad extraterrestre, que comenzó gracias al descubrimiento de los mensajes de Eugenio Siragusa.
El relato alcanzó su punto más intenso con la descripción del primer encuentro con los Hermanos del Espacio, que tuvo lugar el 25 de noviembre de 2009. En los años siguientes, estos seres le indicaron también las figuras de Pier Giorgio Caria y Giorgio Bongiovanni, con quienes el mensaje se enriqueció aún más.
Una historia que, cada vez, despierta una fuerte emoción, como si fuera la primera vez que se escucha.
La transmisión de la verdad
Uno de los temas centrales del encuentro ha sido el compromiso con la difusión de la verdad: no todos eligen seguir este camino, porque a menudo implica alejarse de los amigos de siempre y la necesidad de cambiar el propio estilo de vida. Sin embargo, como ha recordado Marco, solo aplicándose en el conocimiento de la ciencia del espíritu se puede llegar a encontrar la verdad, que a su vez se revela a quienes la buscan con corazón sincero.
La presencia extraterrestre en la Tierra tiene una función mesiánica: anuncia el regreso de Jesucristo, tal y como está escrito en los Evangelios, textos que son testimonios de acontecimientos auténticos y de gran alcance espiritual.
Hoy más que nunca, subrayó Marco, es necesario observar lo que sucede en el mundo y compararlo con las profecías del pasado. Quien no conoce la gran verdad tiende a ridiculizarla, pero la verdad, si es tal, es demostrable. Precisamente por esto hace falta una búsqueda personal, un continuo debate entre fe, experiencia y conocimiento.
El cambio dimensional y el crecimiento espiritual
Hoy vivimos un momento de transición: estamos pasando de la tercera dimensión final a la cuarta dimensión inicial y es un paso nada fácil, que requiere dedicación, altruismo y servicio al prójimo. Dar la vida por quienes sufren, sin esperar nada a cambio, es la clave para elevar las propias vibraciones y armonizarse con las frecuencias superiores.
Marco también ha citado las enseñanzas de Babaji Shiva, quien siempre ha destacado la importancia de las obras sociales y del mantra “Om Namah Shivaya”, poderoso contra todos los males del mundo. Sin embargo, el mantra por sí solo no basta: solo funciona si va acompañado de un auténtico espíritu de altruismo.
Los extraterrestres: mensajeros divinos
De aquí nace la pregunta: ¿por qué estos seres desean comunicarse con nosotros? Los extraterrestres, ha explicado Marco, colaboran en la realización de los prodigios divinos. Son ángeles, en el sentido más puro del término: mensajeros del cielo. De hecho, vivimos en el tiempo del Apocalipsis, palabra que significa “revelación”. Hoy, la verdad está emergiendo en todos los ámbitos del saber humano, sacando todo a la luz.
El origen cósmico del ser humano y la Confederación Interestelar
Los extraterrestres han seguido la historia del mundo desde el Big Bang. La evolución avanza a través de las dimensiones: mineral (primera), vegetal (segunda), animal (tercera). Sin embargo, los planetas por sí solos no pueden generar vida humana. Como células de un cuerpo cósmico, necesitan un impulso externo.
Es aquí donde intervienen los Elohim, seres de luz procedentes de dimensiones superiores, que transforman la especie animal más evolucionada dándole conciencia y forma antropomórfica: así nace el hombre.
Existe, además, una Confederación Interestelar formada por innumerables civilizaciones universales y extra galácticas, unidas en una gran familia cósmica. Estas civilizaciones, ya redimidas y en continua evolución, cooperan bajo la guía de los genios solares, garantes del orden cósmico. Solo con el consentimiento de la Confederación es posible viajar entre los mundos, en defensa del equilibrio universal
Una invitación al valor y a la búsqueda
“Debemos ser la vanguardia de una verdad incómoda”, con estas palabras Marco concluyó un encuentro intenso y profundo. Luego proporcionó un breve excursus sobre las cuatro razas de la humanidad terrestre, sobre el fin del planeta Mallona y las principales características de la nueva genética cósmica. A continuación, el público planteó preguntas y curiosidades.
Fue un acontecimiento muy rico en enseñanzas, que ofreció nuevas claves de lectura para comprender la evolución del hombre y del cosmos. Entre el público algunas personas escucharon estas preciosas enseñanzas por primera vez y quedaron fascinadas y cautivadas, mientras que un joven se emocionó muchísimo por este encuentro, habiendo conocido el mensaje de Eugenio Siragusa hace 15 años y no habiendo encontrado hasta ahora a nadie con quien poder compartir estos inmensos conocimientos.
Un agradecimiento de corazón a Marco por su disponibilidad y profundidad, y a Filippo y Lucia por tan generosa hospitalidad en esta noche de luz y conciencia.
Con devoción,
Alice
15 de octubre de 2025















