Es como llegar al final de la lectura de un libro para volver a las emociones de las primeras páginas.
Pasado-Presente no son otra cosa que el testimonio de la dedicación irreductible, constante e incansable de un hombre enfocado en la realización del proyecto Divino que indica el camino hacia la Salvaciòn del Espíritu. Esto último debe entenderse como el despertar de lo que estaba dormido en quienes buscan y persiguen el ejemplo de Cristo.
En la obra giovannea el ejemplo de Cristo lo da un hombre llamado Giorgio Bongiovanni que es LA SEÑAL y EL CÁLIZ VIVIENTE DE LA COMUNIÓN CRISTICA.
Esta SEÑAL ha dejado y deja huellas VISIBLES de su constante presencia.
Como se puede ver en las fotos de un verano de hace 16 años, en un pequeño pueblo de Friuli (Brugnera) la Voz de DIOS expresaba una sanguinación más.
Tengamos presente el aspecto numerológico y la mencionada voluntad de obedecer el sacrificio de Giorgio y examinemos ahora las SEÑALES que aparecieron durante el sangrado.
Señales impresas con sangre que sólo el Cielo puede diseñar:
a) una cruz griega de lados iguales
b) una cruz cristiana formada por 9 gotas de sangre
La cruz, en general, es uno de los símbolos más antiguos que se conocen. Los hallazgos encontrados se remontan incluso a antes del cristianismo. En Creta, por ejemplo, se encontró una cruz de mármol perteneciente a la cultura minoica que data del año 1500 a.C.
La cruz griega consta de 4 brazos de igual longitud en ángulo recto.
La investigación esotérica indica que simboliza la Naturaleza Divina de Cristo.
La cruz griega dibujada en la sábana, que confirma la mano directa de Dios, tiende a demostrar en el momento la presencia eterna.Como es arriba es abajo, Así como es Oriente es Occidente.
Simboliza la Crucifixión de Jesucristo.
La cruz latina está impresa en el lienzo por 7 gotas de sangre verticales y 2 gotas de sangre horizontales, de modo que formen una suma igual a 9.
Desde la antigüedad, los Illuminati han considerado el número 9 como la realización del Espíritu en la superación de la materia mediante la finalización del ciclo evolutivo.
La presencia detectada, simultáneamente, de los dos tipos de cruz imprime claramente el deseo de Adoniesis de confirmar su presencia en la sanguinación. La naturaleza divina de Cristo en su sacrificio de redención se manifiesta por la humanidad mediante la crucifixión de un hombre compenetrado por Cristo.
Volviendo al número 16 que aparece significativamente en la vida de Giorgio, es curioso poder simplificar este número con el 7 (16=1+6=7).
Esta resonancia, que no debe ser considerada como ciencia profusa, indica cómo ciertos valores, incluidos los números, regresan en el camino del conocimiento y de la operatividad.
...como el matrimonio entre Espíritu y Materia;
...cuántos velos de Isis para alcanzar la Iluminación;
...cuántos días en que la Obra del Génesis;ha sido cumplida
...tantos como los planetas clásicos de la antiguedad;(modificada porque sino pierde el sentido)
...cuántos plexos (chakras) hay en el cuerpo humano;
...cuántas Virtudes y Vicios;
...cuantas notas musicales;
...cuántas estrellas componen las Pléyades veneradas desde los albores de la humanidad.
Por lo anterior lo que importa es que con su sanguinación, este Hombre del Cielo es de admirar por su obstinada fidelidad a la causa que está por encima de él y de todos nosotros. Una fidelidad tal de ser ejemplo para todos, para que no se cambie el supremo ideal con la libertad de la salvación física.
El ejemplo de Giorgio Bongiovanni tiene un solo camino: el amor por la verdad. Este último tiene una sola medalla con dos caras: Amor y Justicia.
En conclusión, el cielo susurró a mi corazón que el Espíritu de Elías en Juan Bautista ya nos había visto a todos y nos había aceptado en el proyecto desde el momento de la concepción sin perjuicio del libre albedrío individual en el plan de Dios.
Antonio Caldarelli
Pordenone, 2 de julio de 2024