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testa 2016enespañol

giorgio oceanoweb 133 AÑOS DE ESTIGMAS
De Marco Marsili

33 años de Estigmas.
33 años de la Cruz.
33 años de Redención.
33 años de Verdad.
33 años de amor.


Desde hace 33 años el prodigio divino se manifiesta a los ojos del mundo.
Prodigio de misericordia y Redención para quien tiene ojos para ver, oídos para oír y corazón para comprender la presencia del Todopoderoso en la historia.

Aquí está el Signo de los signos, un prodigio de despertar para los durmientes. Un milagro de salvación para los que acogen el gran Llamado de la Sangre Solar, para los que mantienen intacta la Fe consciente, los Despertados, los Vivos.
Prodigio de amonestación para los testarudos, para los que niegan, rechazan, se burlan u ocultan la gran Verdad del Tiempo de todos los tiempos. Advertencia a los que se alzan en el altar de la mentira, y ocultan el esplendor de los cielos bajo el velo de sus sombras.

Prodigio de terror para los asesinos de la vida. Saben, que cada sanguinación de los Estigmas vacía la clepsidia del Apocalipsis, es como el tañido del reloj de la historia, es la cuenta regresiva que culminará con la derrota de los perversos, su final, su duro destino, la Segunda Muerte que en los milenios venideros habrá de reconducirlos a la Luz perdida.

33 años de Estigmas. Prodigio de Justicia para toda la humanidad del planeta Tierra, lágrimas de Justicia, lágrimas de sangre que llueven sobre el desierto del mundo, y se transforman en gotas de agua para saciar la sed del pueblo de los Llamados, y se transforman en gotas de fuego para marcar el alma de los condenados.
33 años de Estigmas. Aquí está el Signo de los signos, aquí está el cáliz viviente de la Luz Creadora, el antiguo cráter del que se desborda la esperanza de todo el firmamento y la luz de los Eternos dioses. Sí, porque la sangre es luz y la luz es el hogar de la eternidad, el hogar del espíritu, el hogar de la inteligencia, el hogar de nuestra verdadera identidad, el hogar de quienes somos. Porque los que niegan la Señal de los signos, en verdad se niegan a sí mismos. Y los que lo abandonan después de haberlo conocido, después de haber sido curados, después de haberlo visto y tocado, en verdad se abandonan a sí mismos.

¿No ven cómo resplandece la sangre del Altísimo? Brilla y resplandece como un espejo viviente donde el hombre puede encontrarse, donde el hombre puede mirarse a la cara y decir "¡Yo soy!"

¡Aquí está la Señal de las señales! ¡He aquí el prodigio de la gran Revelación! ¡He aquí al Eterno que mira al rostro del hombre que vive en el tiempo! ¡He aquí el trigo y las uvas, el pan y el vino, el cuerpo y la sangre del Creador que desgarra la carne de la historia humana! Aquí está el espíritu del Cielo en el misterioso teatro de la vida terrenal.

33 años de Estigmas.
33 años por Cristo, con Cristo, en Cristo.

33 años como Jesús, pastor de los hombres, que continúa buscando hombres dignos de llamarse hombres, y los busca con la luz de su sangre, con los estigmas como faroles de fuego, como Diógenes en las tinieblas del mundo.

33 años de eternidad... y el reloj de arena del Apocalipsis no se detiene.

Oh, hombre perdido en el polvo del tiempo, ¿cuántas campanadas faltan para tu día?

Con amor fraternal,

Marco Marsili
3 de setiembre del 2022

TREINTA Y TRES AÑOS DE NUESTRO TIEMPO
De Erika Pais

¿Cuantes veces pulsa una estrella mientras la Tierra realiza su órbita alrededor del Sol 33 veces?
Infinitas.

El Sol despunta detrás de las verdes ramas del árbol testigo del Si. Un robusto muchacho yace inerte en el suelo, sus brazos en cruz sellan las manos traspasadas por la Crística Redención. La Sangre Divina asoma fuera de las palmas tímida y dolorosísimamente por primera vez. Un rayo de Sol fulmina y sella el encuentro de La Gnosis Solar con la roja manifestación material de la linfa humana. Lo eterno se detiene y toma forma. La cúpula celeste queda suspendida en el Cielo atrapada entre las dulces exclamaciones pronunciadas por los ángeles de ayer y de siempre. Lo inefable tiene el permiso de ser sustancia.

¿Cuántas vidas entran en una vida?
Demasiadas

Ayudado por el Amor el joven logra apenas incorporarse y comenzar a andar el camino sin sendero. Sus brillantes ojos aún se encuentran perdidos entre el Cielo y la Tierra, no es solo el dolor físico extremo que desde ahora lo acompañará aquello que lo abruma, es todo ese cúmulo de olores, dolores, sensaciones, llantos, gritos, odios y tristezas que lo abrazan y que no provienen de él. No los escucha, pero los siente. No los ve, pero las mira. No son tangibles, pero los toca. No les pertenece, pero ahora son suyos.

¿Cuánta Sangre puede ser derramada por la Redención de los Hombres?
Muchísima.

Desde ahora ese joven lleno de Justicia recorrerá cada rincón del mundo vestido de saco. En todos los pueblos será aclamado y rechazado al mismo tiempo. Llevará con él lo infinito, lo Divino, lo humano y la Sangre para siempre.
El dolor, la tristeza, la esperanza, la apatía y la poca alegría de esta humanidad serán sus amantes inseparables, los amigos con los que sentará a la mesa, los compañeros de interminables noches de insomnio.
Serán los testigos silenciosos de cada ocasión en que deberá yacer nuevamente con los brazos en Cruz y las palmas vueltas al Cielo.

¿Cuántos años son 33 años?

No es el tiempo, es el espacio y todo lo que cabe en el.
El lacerante dolor que fustiga su cansada humanidad le quita el respiro. Su corazón pulsa levemente y empuja la Sangre Divina que emerge de sus manos, sus pies y el costado. Cada vez que este milagro sucede es capaz de sentir claramente como ésta, navegando por sus venas cual si fuera ríos de justicia y también de mansa calma, recorre cada parte de su cuerpo. Puede escuchar el chasquido silencioso del diálogo sináptico entre sus neuronas, percibe el pinchazo sutil del nuevo bello corporal atravesando la piel para ver la luz, el tenue roce del aire que entra y sale de sus pulmones, siente el impacto de la luz al rebotar en sus pupilas y aunque su lecho pareciera que es su tortura es capaz de volar más allá de su ventana. El Sol lo transporta a través de sus rayos tiernamente dividido en millones de partículas para consolarlo. Allí es abrazado por el perfume de la flor que aun no nace, el sonido de la música que aun no ha sido escrita ni sonada, el amor de un hermano que aún no ha conocido, el canto del pájaro que salta por primera vez del nido, el contacto suave de un recién nacido, la esperanza de la vida que se resiste a ser vencida.

¿Cuántas veces puede morir y renacer un Hombre?
Más de 10.000, tantas veces como diga Si.

Erika Pais.

33 AÑOS DE ESTIGMAS
De Claudio Rojas

33 años de estigmas…. AGRADECIMIENTO ETERNO !!!…es lo que podemos sentir, junto a la vergüenza a veces de mirarte, no porque sienta que hemos cometido pecados imperdonables, sino por tanto amor y sacrificio entregado por ti hacia nosotros, que nos hace sentir minúsculos. No quiero adularte; sé que no eres el Cristo, pero él se manifiesta a través de ti de muchas formas y tú eres su voz y su voluntad; no eres el Padre Dios, pero él, especialmente ahora camina a tu lado y manifiesta tu sentir, su ira y su justicia pronta, a través tuyo; y sobre todo eres el portador de la luz Divina para nosotros en este mundo cuya oscuridad nos cuesta mucho tolerar, y cada vez se hace más y más difícil.

Tampoco eres el Espíritu Santo, pero la más alta voluntad del cielo se manifiesta a través del Padre, del Hijo y de sus ángeles, siempre a través tuyo. Las comparaciones son odiosas, pero tú eres la única fuente de luz verdadera que conocemos, porque otras fuentes se han ido apagando, distorsionando o desapareciendo porque no hicieron el paso siguiente que el cielo pidió…
33 años de sacrificio, es muy simbólico en una misión mesiánica; habría que ser ciego para no darse cuenta.
Gracias Giorgio por tu sacrificio inmenso de infinito amor y sobre todo gracias por darnos la vida…

Claudio Rojas

33
Una hermana del Arca de Buenos Aires

Quimera de Dios,
el sueño imposible,
hombre humano terrestre ,
guerrero temible.

Capricho divino
encontrar candidato,
en misión celeste
“il figlio mio amatto”

Cómo es que se acepta,
sin perder la cordura,
tan sagrado destino,
sin un rasgo de locura .

Sólo una Madre divina,
con delicado ruego,
vence los miedos terribles,
del invisible ego.

Vaciarse de todo, hasta de la sangre,
ofrecer la vida, en pedazos de carne.
Renunciar al deseo, como triste amante,
Cáliz viviente bendito, con rumbo errante.

Señal en el mundo, de toda la historia.
Conciencia presente, para nuestra memoria.
Con paso firme, perfumas el escenario,
Como el Cristo Jesús, camino al Calvario.

Para crear un sueño , un nuevo mundo,
Una utopía de un cambio profundo.
Una ola de amor, con una nueva conciencia,
Que grite desde el alma, con divina presencia.

Tal vez , algún día,
la historia del planeta,
cuente que un Ungido,
aceptó la apuesta.
La de ser espejo,
del dolor humano,
de la lucha eterna,
del amor sagrado.

De traer el cielo, en una gota de sangre
Que nos aferra a la vida y al hambre .
De gemir por los violados, que nos hermanan.
De amar al destino, que nos entrama.

33 horas , ya se han esparcido en esta tierra.
De tu precioso legado
Es tu tiempo , el del Verbo
porque tu Kairós ha llegado .

2 de setiembre del 2022

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