BREVE CRONICA DE NAVIDAD
En estos días de fin de año nuestra sede de Sant'Elpidio a Mare ha sido un punto de encuentro de muchos hermanos y simpatizantes que han venido de toda Italia para pasar con nosotros una Navidad distinta; mejor dicho una verdadera Navidad. Cada vez que tenemos la oportunidad de vernos se convierte en un motivo para profundizar el mensaje espiritual, para tomar conciencia del tiempo que estamos viviendo.
Ha sido verdaderamente una Navidad especial, vivida con Raúl Bagatello, el sencillo y dispuesto presidente de Funima que, junto a su compañera de vida y cercana colaboradora Gabriela Furlani, está en Italia desde finales de Noviembre y ha efectuado algunas importantes etapas en Bari, Roma y Pordenone, además de Porto Sant'Elpidio y alrededores para recaudar fondos para su causa en favor de muchos niños de los Andes argentinos.
El 1 de enero recibimos la visita de Antonio Urzi y de su compañera Simona, testigo además de ser autora junto a él de muchas de las sorprendentes filmaciones de las ya famosas astronaves extraterrestres que están suscitando el interés de los más importantes investigadores de este fenómeno en el mundo.
Precisamente el 24 de diciembre Antonio ha realizado una filmación espectacular, divulgada en todo el mundo y avalada por el mensaje que Giorgio Bongiovanni ha recibido al respecto. Cada vez más a menudo sus filmaciones acontecen contemporáneamente a momentos particulares de la experiencia mística que Giorgio vive desde hace muchos años, incluso simultáneamente a la sangración de los estigmas.
Por la tarde nos encontramos en el arca. Giorgio habla de la experiencia de estos dos jóvenes, se proyecta como estreno absoluto para los presentes el documental recién concluido “el caso Urzi” que muy pronto esperamos que sea transmitido a través de la Televisión nacional a millones de personas. Simona y Antonio son muy felices, también en el momento que Giorgio les regala a los dos los rubíes engarzados en estrellas con 7 puntas.
Giorgio llama la atención de Antonio sobre la importancia de su misión y le aconseja de permanecer siempre íntegro y atento en el escuchar y dejarse guiar por este instinto interior que le lleva a sentir con antelación la presencia de los Seres de Luz que son la fuente de su contacto.
El 2 de enero nos encontramos para cenar juntos en el arca y despedirnos de Raúl y Gaby que al día siguiente marcharían hacia Argentina. Están con nosotros también Antonio y Simona; lamentablemente faltaba Giorgio que tenía un poco de fiebre y se había quedado en casa.
La sencillez y la claridad de Raúl llegan al corazón de todos, le firmeza de su fe, de su obra, “Vosotros sois mi familia, es así que os siento a todos y os llevo en el corazón, pero mis niños me llaman, me necesitan. Tengo que construir otros “techos” para acogerles, para darles de comer”.
Antes de despedirnos Raúl y Gaby donan a Antonio y Simona un frasquito con lágrimas de la Virgen Mística de Asunción, Paraguay. Se emocionan y lo miran en silencio. Antonio lo recibe como símbolo de fuerza que les acompañara en el camino que han emprendido. Mientras tanto nuestro camino en la Obra del Cielo sigue adelante con la consolación de los Signos que el Cielo manifiesta al mundo entero día a día.
Maria José
Sant'Elpidio a Mare (Italia)
4 de enero 2009
Ha sido verdaderamente una Navidad especial, vivida con Raúl Bagatello, el sencillo y dispuesto presidente de Funima que, junto a su compañera de vida y cercana colaboradora Gabriela Furlani, está en Italia desde finales de Noviembre y ha efectuado algunas importantes etapas en Bari, Roma y Pordenone, además de Porto Sant'Elpidio y alrededores para recaudar fondos para su causa en favor de muchos niños de los Andes argentinos.
El 1 de enero recibimos la visita de Antonio Urzi y de su compañera Simona, testigo además de ser autora junto a él de muchas de las sorprendentes filmaciones de las ya famosas astronaves extraterrestres que están suscitando el interés de los más importantes investigadores de este fenómeno en el mundo.
Precisamente el 24 de diciembre Antonio ha realizado una filmación espectacular, divulgada en todo el mundo y avalada por el mensaje que Giorgio Bongiovanni ha recibido al respecto. Cada vez más a menudo sus filmaciones acontecen contemporáneamente a momentos particulares de la experiencia mística que Giorgio vive desde hace muchos años, incluso simultáneamente a la sangración de los estigmas.
Por la tarde nos encontramos en el arca. Giorgio habla de la experiencia de estos dos jóvenes, se proyecta como estreno absoluto para los presentes el documental recién concluido “el caso Urzi” que muy pronto esperamos que sea transmitido a través de la Televisión nacional a millones de personas. Simona y Antonio son muy felices, también en el momento que Giorgio les regala a los dos los rubíes engarzados en estrellas con 7 puntas.
Giorgio llama la atención de Antonio sobre la importancia de su misión y le aconseja de permanecer siempre íntegro y atento en el escuchar y dejarse guiar por este instinto interior que le lleva a sentir con antelación la presencia de los Seres de Luz que son la fuente de su contacto.
El 2 de enero nos encontramos para cenar juntos en el arca y despedirnos de Raúl y Gaby que al día siguiente marcharían hacia Argentina. Están con nosotros también Antonio y Simona; lamentablemente faltaba Giorgio que tenía un poco de fiebre y se había quedado en casa.
La sencillez y la claridad de Raúl llegan al corazón de todos, le firmeza de su fe, de su obra, “Vosotros sois mi familia, es así que os siento a todos y os llevo en el corazón, pero mis niños me llaman, me necesitan. Tengo que construir otros “techos” para acogerles, para darles de comer”.
Antes de despedirnos Raúl y Gaby donan a Antonio y Simona un frasquito con lágrimas de la Virgen Mística de Asunción, Paraguay. Se emocionan y lo miran en silencio. Antonio lo recibe como símbolo de fuerza que les acompañara en el camino que han emprendido. Mientras tanto nuestro camino en la Obra del Cielo sigue adelante con la consolación de los Signos que el Cielo manifiesta al mundo entero día a día.
Maria José
Sant'Elpidio a Mare (Italia)
4 de enero 2009