Esta página web utiliza cookies de carácter técnico propios y de terceros, para mejorar la navegación de los usuarios y para recoger información sobre el uso de la misma. Para conocer los detalles o para desactivar las cookies, puedes consultar nuestra cookie policy. Cerrando este banner, deslizando esta página o haciendo clic sobre cualquier link de la página, estarás aceptando el uso de las cookies.

COREA DEL NORTE AMENAZA CON LANZAR SU PODER NUCLEAR CONTRA SEUL Y EEUU
Pyongyang considera una agresión las maniobras conjuntas en el mar de Japón.
JOSE REINOSO - Pekín - 25/07/2010
Las maniobras militares conjuntas de Estados Unidos y Corea del Sur en el mar de Japón, cuyo inicio está previsto hoy, han provocado una fuerte escalada de la tensión en la península coreana, una de las zonas más fuertemente armadas del mundo. Pyongyang elevó ayer un grado más su retórica habitual y amenazó con una potente acción nuclear en respuesta a los ejercicios aliados, que ve como un ensayo para invadir su territorio.
"El Ejército y el pueblo de la República Democrática Popular de Corea [nombre oficial del país] contrarrestarán de forma legítima con su potente disuasión nuclear las mayores maniobras de guerra nucleares jamás organizadas por Estados Unidos y las fuerzas de la marioneta surcoreana", dijo la Comisión Nacional de Defensa, que preside el líder norcoreano Kim Jong-il, a través de un comunicado de la agencia oficial KCNA. "Estas maniobras no son más que provocaciones declaradas, destinadas a sofocar la República Democrática Popular de Corea por medio de las armas".
Los comentarios siguen la amenaza efectuada previamente de emprender "en el momento que haga falta" una "guerra sagrada" contra Estados Unidos y Corea del Sur, por los "imprudentes" ejercicios navales y aéreos.
Washington ha asegurado que la operación, en la que participarán 8.000 militares, 200 aeronaves y 20 navíos -entre ellos, el portaaviones USS George Washington-, es una advertencia a Pyongyang por el hundimiento, en marzo, de una corbeta surcoreana, en el que murieron 46 marineros.
Estados Unidos y Corea del Sur acusan al régimen de Kim Jong-il de haber torpedeado el buque Cheonan cerca de la frontera marítima en disputa en el mar Amarillo. Pyongyang ha dicho repetidas veces que no tiene nada que ver con el incidente.
Las maniobras, cuya fecha fue anunciada esta semana, habían sido planeadas poco después de que una investigación internacional auspiciada por Seúl concluyese en mayo que ese naufragio fue obra de un ataque norcoreano.
Seúl, Washington y Tokio, que participará por primera vez como observador en los ejercicios militares, atribuyen ese suceso a un torpedo de un submarino norcoreano, pero el régimen comunista de Pyongyang ha negado en todo momento su responsabilidad.
China ha mostrado su "profunda preocupación" por la escalada de tensión y ha pedido mesura a ambas partes. Las presiones de Pekín forzaron a trasladar los ejercicios del mar Amarillo -que se encuentra entre la península coreana y China- al mar de Japón, al este de Corea del Sur. Pero Washington y Seúl han advertido que esta es solo la primera de la decena de maniobras que tienen previsto efectuar en la zona los próximos meses, y que tendrán lugar en ambos mares.
Ante la creciente retórica bélica norcoreana, Estados Unidos ha reaccionado con cautela y le ha pedido que adopte una actitud "constructiva", al tiempo que los responsables militares de Corea del Sur han incrementado su vigilancia en las áreas fronterizas.