NUEVA ALARMA POR EL VERTIDO EN EL GOLFO Washington ordena a BP la entrega de un informe por la aparición de una posible fuga.- Desde hacía cuatro días no salía petróleo de la plataforma sumergida.
Pocos días después de que la empresa BP instalara una nueva campana de contención que frenó el vertido de crudo en el Golfo de Mexico, el Gobierno estadounidense ha ordenado a la petrolera británica que le presente un plan para la reapertura de su pozo sellado después de que los ingenieros al cargo de las operaciones hayan detectado unas filtraciones de hidrocarburos en el lecho marino cercano a dicho pozo.
"Ordeno que me entreguen un procedimiento escrito para la reapertura de la válvula de contención lo más rápidamente posible (...) En caso de que se confirme la filtración de hidrocarburos cerca de la boca del pozo", afirmó este domingo (madrugada del lunes hora española) el almirante retirado de la Guardia Costera Thad Allen, máximo responsable gubernamental de las labores de limpieza y contención del vertido, en una carta dirigida al jefe de la unidad de restauración de BP en el Golfo de México, Bob Dudley.
En la misma misiva, Allen pide a BP que notifique al Gobierno cualquier fuga en el plazo de cuatro horas de su detección. Una fuga que aún está por confirmarse, aunque Allen aseguró que los niveles de presión son inferiores a lo previsto e indicó que es necesario trabajo adicional para entender los motivos. Una situació que según el ex almirante puede ser debida bien a la disminución de las existencias de crudo en el pozo o bien a potenciales fuga debido a algún daño en la estructura del manantial.
Esta orden se debe a que la detección de esta fuga podría significar que existen problemas en la campana metálica colocada por BP la semana pasada, y que según la compañía había conseguido por primera vez detener por completo el escape de petróleo. Desde la instalación de esta última campana de contención, la compañía petrolífera estaba realizando pruebas para determinar su eficacia. Unas pruebas que debían permitir a BP presentar un pan al Gobierno de Obama con las indicaciones a seguir y el modo en el que se abrirían las válvulas para dejar paso al petróleo que deberían recoger en la superfície los barcos. Tras los indicios de una nueva fuga, ahora la Administración reclama a BP un nuevo plan, mientras que la compañía pierde las esperanzas de terminar con un problema que empezó el pasado mes de abril con la explosión de la plataforma en el Golfo.
AGENCIAS - Washington - 19/07/2010
EL PAIS
http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Nueva/alarma/vertido/Golfo/elpepusoc/20100719elpepusoc_1/Tes
"Ordeno que me entreguen un procedimiento escrito para la reapertura de la válvula de contención lo más rápidamente posible (...) En caso de que se confirme la filtración de hidrocarburos cerca de la boca del pozo", afirmó este domingo (madrugada del lunes hora española) el almirante retirado de la Guardia Costera Thad Allen, máximo responsable gubernamental de las labores de limpieza y contención del vertido, en una carta dirigida al jefe de la unidad de restauración de BP en el Golfo de México, Bob Dudley.
En la misma misiva, Allen pide a BP que notifique al Gobierno cualquier fuga en el plazo de cuatro horas de su detección. Una fuga que aún está por confirmarse, aunque Allen aseguró que los niveles de presión son inferiores a lo previsto e indicó que es necesario trabajo adicional para entender los motivos. Una situació que según el ex almirante puede ser debida bien a la disminución de las existencias de crudo en el pozo o bien a potenciales fuga debido a algún daño en la estructura del manantial.
Esta orden se debe a que la detección de esta fuga podría significar que existen problemas en la campana metálica colocada por BP la semana pasada, y que según la compañía había conseguido por primera vez detener por completo el escape de petróleo. Desde la instalación de esta última campana de contención, la compañía petrolífera estaba realizando pruebas para determinar su eficacia. Unas pruebas que debían permitir a BP presentar un pan al Gobierno de Obama con las indicaciones a seguir y el modo en el que se abrirían las válvulas para dejar paso al petróleo que deberían recoger en la superfície los barcos. Tras los indicios de una nueva fuga, ahora la Administración reclama a BP un nuevo plan, mientras que la compañía pierde las esperanzas de terminar con un problema que empezó el pasado mes de abril con la explosión de la plataforma en el Golfo.
AGENCIAS - Washington - 19/07/2010
EL PAIS
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